Falda de ternera rellena con salsa de cebollas

Comienza por seleccionar una buena falda de ternera y salpimentarla al gusto. En una olla a presión, calienta un chorrito de aceite de oliva y, cuando esté caliente, añade la carne. Debes dorarla muy bien por todos sus lados para sellar los jugos, lo que otorgará un gran sabor al platillo. Una vez que la carne esté bien dorada, retírala y mantenla tapada para conservar su calor. En la misma olla, añade un poco más de aceite y sofríe trocitos de zanahoria, guisos de cebolla cortados en juliana y ajos picados. Esta mezcla debe cocinarse a fuego medio-bajo hasta que adquiera un color caramelo, lo que llevará su tiempo y paciencia. Cuando tengas el color deseado, vuelve a colocar la carne en la olla, junto con el jugo que haya soltado, e incorpora las hierbas como el laurel y el romero, además de un poco de vino blanco que realzará el sabor del redondo de ternera relleno.

Cierra la olla a presión y ajusta la válvula a nivel 2. Cocina la carne durante aproximadamente media hora, lo que permitirá que se impregne de los sabores de las verduras y las hierbas. Este es un paso crucial para asegurarte de que la falda de ternera esté tierna y jugosa. Después de media hora, apaga el fuego y espera brevemente antes de abrir la olla, permitiendo que la presión se libere de manera segura. Retira la carne y déjala escurrir sobre un plato, y mientras tanto, prepara un trozo de papel de aluminio para envolver la carne una vez que esté un poco templada. Esto ayudará a mantener su ternura y sabor, optando por conservarla en el frigorífico hasta el momento de servir.

Al preparar la salsa, es importante extraer todos los sabores que se han acumulado en la olla. Primero, retira las hierbas de la mezcla y vierte el jugo resultante en una licuadora. Bate todo hasta que esté bien mezclado y luego cuela la salsa a través de un colador de malla fina para eliminar cualquier residuo. Esto te dará una salsa suave y homogénea que puedes colocar en un cazo. Lleva esta salsa a ebullición y permite que se reduzca a fuego medio. Si observas que la salsa no tiene la consistencia deseada, déjala espesar un poco más. Esta etapa es primordial, ya que una buena salsa complementará perfectamente el redondo de ternera relleno.

Para emplatar, corta la falda de ternera en frío para obtener rebanadas delgadas y manejables. Si lo prefieres, puedes calentarlas brevemente en el microondas para que estén a una temperatura ideal al servir. Acompaña la carne cortada con unas deliciosas patatas panaderas y setas al ajillo, que complementan perfectamente el plato. Finalmente, napar la carne con la salsa caliente que preparaste en el paso anterior ayudará a amalgamar todos los sabores. De este modo, disfrutarás de un exquisito redondo de ternera relleno, ideal para cualquier ocasión especial.