Las necoras cocidas son una opción deliciosa y fácil de preparar, ideales para compartir en esas reuniones familiares o con amigos que tanto disfrutamos. Este plato no solo destaca por su exquisito sabor, sino que también es muy versátil: puedes servir las necoras como un acompañamiento en una comida más elaborada o convertirlas en el plato principal de una cena ligera. Su popularidad en la costa española, especialmente en Galicia, se debe a su frescura y al sabor marino que aportan a nuestras mesas.

Además, un dato curioso sobre las necoras es que, a menudo, son consideradas un auténtico manjar en la gastronomía local, y su temporada de captura coincide con los meses más fríos del año, lo que las convierte en una opción perfecta para disfrutar cuando apetece algo reconfortante. Cocer necoras es un proceso sencillo que resalta su sabor natural, y con un toque de limón y un poco de alioli, se transforman en la estrella de cualquier encuentro. ¡Prepárate para sorprender a tus invitados con esta delicia del mar!

Información nutricional(por ración)

Energía

120 kcal

Fibra

25 g

Proteínas

2 g

¿Cuántos comensales?
4
Agua
Agua
4 litros el agua siempre el doble que el peso del marisco
Sal
Sal
30 gramos por litro
Laurel
Laurel
1 hoja
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Paso 1 de 4

Preparar el agua para cocer las nécoras

El primer paso para cocinar nécoras cocidas es preparar el agua. Utiliza una olla grande que tenga suficiente capacidad para las nécoras. Llena la olla con agua y colócala en el fuego a alta temperatura hasta que empiece a hervir. Este es un buen momento para sacar las nécoras congeladas. Es esencial inspeccionarlas y asegurarte de que están en buen estado antes de cocerlas, ya que la calidad influye en el resultado final de las nécoras cocidas. Mientras el agua hierve, podrás disfrutar de la expectativa de un delicioso marisco que, después de la cocción, será la estrella de tu plato.

Paso 2 de 4

Sal y laurel en el agua

Una vez que el agua esté hirviendo, es hora de darle sabor. Añade sal generosamente a la olla, asegurándote de que el agua quede bien sazonada. Algunas personas prefieren añadir una hoja de laurel para darle un toque adicional al sabor de las nécoras cocidas. Si decides hacerlo, recuerda que el laurel imparte un aroma sutil y cálido, que complementa maravillosamente al marisco. Sin embargo, si prefieres resaltar el sabor natural de las nécoras, puedes optar por omitir este paso. De cualquier forma, la adición de sal es crucial para obtener un excelente resultado en tus nécoras cocidas.

Paso 3 de 4

Cocer las nécoras con cuidado

Cuando el agua esté hirviendo y sazonada, es el momento perfecto para introducir las nécoras. Hazlo con mucho cuidado; puedes usar pinzas para evitar que el marisco se rompa. Las nécoras cocidas requieren un tiempo de cocción preciso, que varía según el tamaño del marisco. Para nécoras medianas, lo ideal es dejarlas cocer entre 4 y 5 minutos. Este tiempo es clave para asegurarte de que queden tiernas y jugosas. Si las nécoras son más grandes, podría ser conveniente aumentar el tiempo de cocción a un máximo de 7 minutos. Un consejo aquí es no destapar la olla durante la cocción, ya que el vapor es vital para que el marisco se cocine de manera uniforme.

Paso 4 de 4

Enfriar las nécoras y servir

Una vez que haya pasado el tiempo de cocción, es esencial retirar las nécoras del agua caliente con un utensilio adecuado, como una espumadera. Ten cuidado al manipularlas, ya que son delicadas y podrían romperse. Después de sacarlas, es crucial colocarlas en un recipiente con agua muy fría o con hielo. Este proceso detiene la cocción de inmediato y asegura que las nécoras cocidas mantengan su frescura y textura. Déjalas enfriar durante aproximadamente 30 a 40 minutos. Así, no solo estarán listas para servir, sino que también tendrán un sabor óptimo. ¡Disfruta de tus nécoras cocidas como aperitivo o en una deliciosa salsa para potenciar aún más su sabor!

Las necoras cocidas de manera natural son una delicia que no solo deleitarán tu paladar, sino que también aportarán un sinfín de beneficios a tu dieta. Su sabor fresco y auténtico, combinado con su increíble facilidad de preparación, las convierte en una opción perfecta para cualquier ocasión. Además, son una fuente rica en proteínas y nutrientes esenciales, lo que las hace ideales para quienes buscan mantener una alimentación equilibrada y deliciosa al mismo tiempo.

Imagina disfrutar de estas exquisitas crustáceos en una ensalada, como acompañamiento en un plato de arroz o incluso en un aperitivo sofisticado. Las posibilidades son infinitas y se adaptan a distintos gustos y preferencias culinarias. Así que no esperes más, ¡anímate a explorar más recetas relacionadas en nuestra web y descubre nuevas combinaciones que elevarán tus platos a un nivel superior!

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