Cuando pensamos en un postre fresquito para combatir el calor, seguro que piensas en un helado. Pero si quieres preparar algo más ligero y sofisticado, no lo dudes, decántate por una deliciosa mousse. En la videoreceta que te mostramos haremos una de kiwi. Apetecible, ¿a que sí?

Esta receta de mousse de kiwi la tendremos hecha en un momento. Después tendremos que esperar a que se enfríe para degustar este delicioso postre. Cuando lo pruebes, ¡seguro que querrás repetir! Este tipo de postres son de lo más adictivos, ¿no crees?

Información nutricional(por ración)

Energía

401 kcal

Hidratos

38.71 g

Grasas

23.55 g

Fibra

2.51 g

Proteínas

7.28 g

¿Cuántos comensales?
4
Kiwi
Kiwi
4 unidades
Azúcar blanco
Azúcar blanco
100 gramos
Yema de huevo
Yema de huevo
2 unidades
Huevo
Huevo
2 unidades
Mantequilla
Mantequilla
50 gramos
Clara de huevo
Clara de huevo
2 unidades
Nata para montar
Nata para montar
100 gramos 35% m.g.
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Receta

Mousse de kiwi

Paso 1 de 3

Pela los kiwis y sácales la parte dura de su base. Córtalos a trozos no muy grandes y tritúralos bien con un túrmix. Cuélalos por un colador de malla fina y reserva su puré.

Paso 2 de 3

Pon a calentar un cazo con agua. En cuanto hierva, colócale encima un cuenco metálico o de pyrex. Tienes que procurar que el recipiente no toque el agua; que solo le llegue el vapor que ésta desprende al hervir.
Añade el azúcar, las yemas y los huevos. Trabaja la mezcla con un batidor hasta que tenga un aspecto uniforme. Mézclale el puré de kiwi y sigue trabajando la pasta con el batidor hasta que se empiece a espesar.
Pasados unos 10- 15 minutos, retira el cuenco del baño María. Añade la mantequilla e incorpórala al preparado.
Cambia la crema de recipiente. Tápala con un papel film que no solo la cubra, sino que la toque. De esta manera no se le formará una costra en contacto con el aire.
Deja que la crema se enfríe.

Paso 3 de 3

Coloca las claras en un bol. Móntalas a punto de nieve. Resérvalas.
Monta la nata a punto de nieve.
Mezcla, con cuidado para que no te baje, la nata y la clara de huevo montadas. Para hacerlo, deberás realizar movimientos de arriba hacia abajo, incorporando aire a la mezcla, para que la mouse mantenga su estructura ligera.
Vierte la masa en copas o vasos de sidra y déjalos enfriar en la nevera un par de horas hasta que la mouse tome cuerpo.

Puedes combinar distintos tipos de mousse para asegurarte que todos tus invitados quedan contentos. Por ejemplo, con una típica mousse de limón. Mmmm… ¡Buenísima!

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