Sándwich de pollo

Limpia bien el muslo de pollo, asegurándote de que no queden restos de plumas. Este es un paso crucial para lograr un delicioso sándwich de pollo. Luego, coloca el pollo en una cacerola y añade agua junto con una pastilla de Avecrem Caldo de Pollo. Cuando el agua rompa a hervir, deja que el pollo cocine a fuego medio durante al menos 20 minutos. Asegúrate de que el pollo esté bien cocido para disfrutar de un sangui de pollo jugoso y sabroso. Después de la cocción, escúrrelo y deja que se enfríe un poco antes de trocearlo muy fino. Este pollo será la base perfecta para tus sanduches de pollo.

Una vez que tengas el pollo bien troceado, es hora de preparar la mezcla que hará que tu sándwich de pollo sea irresistible. En un bol grande, añade la lechuga ya troceada y con cuidado mezcla el pollo desmenuzado y la mayonesa. Aquí puedes ajustar la cantidad de mayonesa según tu preferencia, pero recuerda que no quieres que la mezcla sea demasiado pesada. Este paso es esencial para conseguir la textura cremosa que equilibra muy bien el sabor del pollo en tu sandwich pollo. Asegúrate de mezclar bien para que cada bocado de tu sangui de pollo esté lleno de sabor. ¡Tu mezcla para el sándwich de pollo estará lista!

Con la mezcla lista, es momento de montar tu delicioso sándwich de pollo. Toma dos rebanadas de pan de molde y coloca una generosa cantidad de la mezcla de pollo y lechuga en una de las rebanadas. Añade rodajas de huevo cocido para un extra de sabor y textura, y si lo deseas, puedes agregar una loncha de jamón y queso. Cubre con la otra rebanada de pan. Para dar ese toque crujiente al final, tuesta el sándwich en una sartén con un poco de mantequilla hasta que esté dorado por fuera. ¡Listo! Ahora tienes un exquisito sandwich de pollo que podrás disfrutar a cualquier hora del día, ya sea como almuerzo o cena.