Aunque el pato no es una carne que acostumbramos a comer a diferencia de la ternera, el pollo o el cerdo, lo cierto es que da un gran resultado culinario y queda jugosa y tierna. Lo más habitual es cocinarla y acompañarla de sabores dulces o agridulces como miel, vinagres balsámicos o salsas de frutas. ¡Queda deliciosa!

Hoy vamos a preparar la pechuga de pato con granada, un fruto de otoño con el que lograremos un plato lleno de sabor y en pocos minutos. De hecho, es una receta que no necesita de mucho tiempo y complicadas elaboraciones. Es súper sencilla, así que con tantos alicientes no tienes excusa para no cocinarla, te va a encantar. 

¿Cuántos comensales?
4
Aceite de oliva virgen extra
Aceite de oliva virgen extra
1 cucharada
Vino blanco
Vino blanco
1 vaso
Granada
Granada
1 unidad
Pimienta
Pimienta
al gusto
Salvia
Salvia
al gusto
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Paso 1 de 2

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Limpia y desgrana la granada. Corta los filetes de pechuga de pato.

Paso 2 de 2

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Continúa la cocción durante 10 minutos; a continuación, vierte medio vaso de vino blanco y sube la temperatura durante 2 minutos. Sazona con pimienta y sirve caliente.

Y aunque solemos consumir pato de vez en cuando y sobre todo en comidas especiales guárdate la receta que te recomendamos ahora porque es exquisita: pato a las uvas y mostaza.

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