Fideuá de pescado y marisco

En una paellera apta para horno, calienta aceite de oliva virgen extra y sofríe la cebolla y el pimiento rojo bien picados durante unos 15 minutos, o hasta que estén tiernos. Asegúrate de remover con frecuencia para que no se peguen. Cuando la cebolla esté traslúcida, incorpora el pimentón dulce, la merluza troceada y las gambas. Este es un paso crucial para la fideuá de marisco y pescado, ya que las capas de sabor que se desarrollan en este proceso son fundamentales. Cocina todo junto durante unos 4 minutos, removiendo con cuidado para que los mariscos no se rompan y se impregnen de los sabores del sofrito.

Una vez que los mariscos se hayan cocinado ligeramente, es el momento de añadir el caldo para fideuá. Asegúrate de que esté caliente para no bajar la temperatura de la mezcla. Cuando el caldo empiece a hervir, añade los fideos que tenías reservados. Remueve todos los ingredientes con una cuchara de madera para que los fideos se distribuyan uniformemente entre el pescado y mariscos. Cocina a fuego alto, permitiendo que el líquido se evapore. Este es un paso esencial en la preparación de la fideuá de pescado, ya que es fundamental conseguir la textura adecuada en los fideos, que deben quedar bien impregnados de los sabores del caldo.

Cuando todo el líquido se haya reducido y los fideos empiecen a absorbir los sabores, es hora de llevar la paellera al horno. Precalienta el horno a 180ºC y coloca la fideuá de marisco y pescado en modo gratinar. Hornea durante aproximadamente 3 minutos, o hasta que los fideos se empinen hacia arriba y adquieran un tono dorado. Este toque final es clave para que la fideuá de pescado tenga esa textura crujiente en la parte superior, contrastando con la suavidad de los mariscos y el pescado. Al sacar la paellera del horno, deja reposar un par de minutos antes de servir para que los sabores se asienten. ¡Disfruta de tu deliciosa fideuá!