Para esos días en los que se escapa algún rayo de sol, en los que te apetece comer al aire libre o simplemente cuando te apetece compartir un buen momento con amigos alrededor de una mesa, te presentamos esta receta para un aperitivo ligerito y sencillo de hacer. Porque por lo que tienes que estar es por ti y no por los fogones.

Las bolas de arroz son un aperitivo ligero perfecto que, a pesar de ser sólo unos bocaditos, te mantendrán saciado y son muy fáciles de transportar. Perfectas para llevar en una mochila.

Además las bolas de patata son un aperitivo perfecto para hacer con niños. Se lo pasarán en grande ayudándote a machacar la patata y haciendo las bolas de arroz. Además, luego seguro que disfrutan mucho más comiéndolas.

¿Cuántos comensales?
4
Arroz blanco
Arroz blanco
200 gramos
Patata
Patata
200 gramos
Perejil
Perejil
30 gramos
Curry
Curry
al gusto
Ajo
Ajo
1 cucharada de café en polvo
Avecrem Pollo
1 pastilla
Mantequilla
Mantequilla
30 gramos
Aceite de oliva virgen extra
Aceite de oliva virgen extra
al gusto
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Paso 1 de 3

recipe-step-1

Lo primero de todo, comienza cociendo las patatas y el arroz. Cuando tengas cocidas las patatas pasa a machacarlas y mézclala con el arroz cocido y bien secado. Cuando estos dos ingredientes estén bien integrados, pasa a agregar la mantequilla.

Una vez bien mezclados forma una bola más o menos homogénea con la masa y cúbrela con papel film. Cuando esté bien protegida, guárdala en la nevera durante 30 minutos.

Paso 2 de 3

recipe-step-2

Pasada la media hora necesaria para que la masa endurezca, sácala de la nevera y forma bolas del tamaño que tú desees. Además, es el momento para rellenar con lo que más te guste. Simplemente cubre el queso de cabra, la chistorra o la morcilla con la masa de la patata, el arroz y la mantequilla y redondea la mezcla hasta formar una bola. Aunque, si lo prefieres, estos aperitivos no tienen por qué rellenarse.

Paso 3 de 3

recipe-step-3

Y para terminar, pasamos a cocinar el aperitivo. En una cazuela con abundante aceite, bien caliente, fríe las bolitas de patata y arroz. Cuando se doren, sácalas del aceite, escurre las bolitas y pasa a emplatarlas.

Así de fácil es tener un bocado delicioso, crujiente ¡y lleno de sabor!

 
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