Cordero guisado con vinagre

Primero tenemos que trocear el cordero en trozos pequeños o grandes. Puedes hacerlo tu mismo con un cuchillo afilado o unas tijeras o bien pedirlo en la carnicería. Finalmente, lo sazonamos con sal.

Ahora desechamos los dos extremos de las zanahorias, las pelamos con un pelador, las lavamos bien y las cortamos a rodajas.

Y seguimos con la cebolla. Primero la dividimos por la mitad la cebolla, le quitamos los extremos y hacemos cortes verticales sin cortar completamente esta hortaliza. Una vez hecho esto, la cortamos lateralmente como si fuese una red. Así conseguiremos trozos pequeños, ideales para hacer un sofrito.
¡Ya tenemos los ingredientes preparados, así que vamos a ello!

Ponemos una cazuela en el fuego con aceite de oliva. Dejamos que el aceite se caliente un poco, añadimos la cebolla picada y dejamos sofreír. Cuando la cebolla cambie de color, añadimos la zanahoria, los guisantes, la media cayena, la pastilla de Avecrem desmenuzada y el cordero. Mezclamos los ingredientes con una espátula y lo dejamos cocinar durante 10 minutos aproximadamente. ¡Seguimos!

Cuando haya pasado este tiempo, añadimos el vinagre y el agua en la cazuela y lo dejamos cocer a fuego lento durante unos 75 minutos más o menos. Luego apagamos del fuego, retiramos, ¡y listo!

¿Qué te ha parecido esta receta? La carne de cordero es una gran fuente de proteína para nuestro cuerpo, además es rica en hierro y contiene vitaminas que ayudan a regular el sistema nervioso. Así que si te gusta el cordero, o has comprado de más, te recomendamos nuestra receta de estofado de cordero con alcachofas y guisantes.