La sopa de almendras es una opción deliciosa y fácil de preparar que seguramente conquistará el paladar de tus seres queridos. Perfecta para compartir en una cena familiar o con amigos, esta versátil receta puede servirse tanto como un reconfortante plato principal como un elegante acompañamiento. Además, su suave y cremoso sabor la convierte en un favorito en muchas cocinas, no solo en el hogar, sino también en eventos especiales. ¿Sabías que esta sopa tiene sus raíces en la gastronomía mediterránea, donde las almendras han sido apreciadas desde hace siglos por sus propiedades nutritivas y su delicioso sabor?

La sopa de almendras no solo es un placer para los sentidos, sino que también ofrece la oportunidad de experimentar en la cocina. Puedes personalizarla añadiendo especias, hierbas frescas o incluso un toque de picante, dependiendo de tus preferencias. Su popularidad ha ido en aumento, especialmente entre aquellos que buscan alternativas vegetarianas y saludables sin sacrificar el sabor. ¡Prepárate para sorprender a tus invitados con esta exquisita receta que, sin duda, dejará una huella memorable en cada comida!

Información nutricional(por ración)

Energía

300 kcal

Hidratos

45 g

Grasas

4 g

Fibra

7 g

Proteínas

12 g

¿Cuántos comensales?
4
Pasta de almendra
Pasta de almendra
1 paquete
Leche
Leche
al gusto
Canela
Canela
1 rama
Almendra
Almendra
100 gramos
Canela
Canela
al gusto en polvo
Azúcar blanco
Azúcar blanco
100 gramos
Limón
Limón
1 unidad cáscara alternativa: naranja
Imágenes generadas con IA
Cooking Mode Desactivado

Con el Cooking Mode tu pantalla no va a entrar en modo hibernación...

Paso 1 de 7

Calentar la leche con sabor a hogar

En una olla a fuego medio, comenzamos calentando la leche casi hasta el punto de ebullición. Es fundamental que no llegue a hervir, ya que esto alteraría la consistencia final de nuestra deliciosa sopa de almendras de la abuela. Cuando veas que empieza a humear, retírala del fuego con cuidado. A continuación, agrega la piel del limón y la rama de canela. Dejamos estos ingredientes infusionar a fuego muy bajo durante cinco minutos. Luego, apágala y permite que repose otros cinco minutos para que los sabores se mezclen adecuadamente.

Paso 2 de 7

Unir la leche con la pasta de almendras

En este paso, es fundamental que agregues la pasta de almendras desmenuzada a la leche que hemos preparado. Usando un batidor, mezcla bien hasta que la pasta se incorpore completamente, asegurando que la sopa de almendras de la abuela tenga una textura homogénea. Después de que estén completamente integrados, añade el azúcar y sigue batiendo con vigor. La mezcla debe volverse ligeramente espesa y sin grumos, lo que la hará perfecta para el siguiente paso.

Paso 3 de 7

Preparar la base con el pan

Para crear la base de nuestra sopa de almendras, utilizaremos una fuente honda, que puede ser de cristal. Favoreciendo una textura deliciosa, corta el pan en rebanadas muy finitas y colócalas en el fondo de la fuente, cubriendo toda la base. Luego, vierte con cuidado la crema hecha a base de leche y almendras sobre el pan. Aquí es crucial remover con suavidad hasta que el pan empiece a ablandarse, asegurando que se humedezca uniformemente con la deliciosa mezcla, creando una fusión de sabores.

Paso 4 de 7

Decidir la presentación

Aquí puedes optar por disfrutar de la sopa de almendras de la abuela directamente, caliente y semilíquida en cuencos, añadiendo almendras fileteadas por encima para un toque crujiente y decorativo. Alternativamente, si prefieres ofrecer una presentación más elaborada, puedes optar por cuajarlas al horno, casi como un pudín de almendras que deleitará a tus invitados.

Paso 5 de 7

Hornear para obtener el pudín

Si seleccionaste la opción de pudín, comienza precalentando el horno a 200º durante diez minutos. Luego, coloca la fuente con la sopa de almendras en la bandeja del medio. Hornear a 180º, utilizando la temperatura arriba y abajo, durante quince minutos es fundamental para que la mezcla cuaje de manera uniforme. El resultado debería ser una consistencia firme pero suave al tacto, perfecta para el siguiente paso.

Paso 6 de 7

Enfriar y desmoldar

Una vez que saques la fuente del horno, es esencial dejarla enfriar antes de refrigerarla si prefieres disfrutar de tu postre frío. Cuando esté completamente fría, desmolda cuidadosamente la mezcla en otra fuente. Espolvorea con canela en polvo al gusto y córtala en cuadrados. Esta etapa es clave para lograr una presentación atractiva y deliciosa, llena de la esencia de la sopa de almendras de la abuela.

Paso 7 de 7

Decorar y servir

Finalmente, decoramos nuestro pudín con almendras fileteadas que, si lo deseas, puedes tostar ligeramente en una sartén para resaltar su sabor. Sirve en cuencos individuales o en una presentación más grande, dependiendo de la ocasión. Este platillo no solo es delicioso, sino que también evoca la calidez y el amor de las recetas pasadas, garantizando una experiencia gratificante para ti y tus seres queridos.

La sopa de almendras es una opción deliciosa y nutritiva que no solo deleitará tu paladar, sino que también aportará numerosos beneficios a tu salud. Con su suave textura y sabor único, esta receta se prepara en un abrir y cerrar de ojos, convirtiéndose en un plato ideal para cualquier ocasión. Además, su riqueza en nutrientes la convierte en una excelente fuente de energía, perfecta para esos días en los que necesitas un extra de vitalidad.

Una de las mejores características de la sopa de almendras es su versatilidad; puedes adaptarla fácilmente a tus gustos personales o añadir ingredientes que tengas a mano. Desde especias aromáticas hasta verduras frescas, las posibilidades son infinitas. Anímate a experimentar y personalizar esta deliciosa receta según tus preferencias. ¡No te quedes solo con esta versión! Explora más recetas relacionadas en nuestra web y descubre nuevas combinaciones que seguro encantarán a todos en casa.

Valora esta recetas 14 valoraciones
Añade esta receta a tus favoritos Y tenla a mano siempre que quieras